El lunes tres de octubre Corea del Norte lanzó un misil balístico que sobrevoló Japón antes de caer en el Océano Pacifico. Como respuesta a este evidente ataque, Estados Unidos y Corea del Sur dispararon cuatro misiles tierra a tierra como un ensayo conjunto la noche del martes.
Según un reporte del Estado Mayor Conjunto surcoreano, los 4 misiles fueron lanzados en el mar del Este (como se le conoce al mar japonés en las dos Coreas) y lograron impactar con los objetivos designados.
Asimismo, el presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, hizo disparar bombas de precisión sobre objetivos simulados en el mar Amarillo.
Se ha confirmado, por medio de los satélites, que Corea del Norte tiene meses preparando una nueva detonación en Punggye-ri, y se cree que el lanzamiento del martes, por parte de Estados Unidos y Corea del Sur, puede anticipar un nuevo ensayo atómico.